Concepción de Mata Espeso ha cumplido el pasado septiembre 90 años, una fecha que coincide además con el 200 aniversario de la conocida botica que regenta junto a sus hijas en Ordoño II. Una farmacia fundada en el año 1807 y que además se trata de la más antigua de la ciudad de León.
47 años al frente de la Farmacia de Mata Espero, pero toda una vida dedicada al preparado y a la combinación de productos naturales y de formulación, de remedios para conservar la salud. Concepción de Mata Espeso cumplió el pasado 10 de septiembre, 90 años, una fecha que hoy queremos volver a rememorar y que coincide además con el 200 aniversario de la conocida botica que regenta junto a sus hijas en Ordoño II, farmacia fundada en el año 1807 y que además se trata de la más antigua de la ciudad de León.
La vida de esta mujer, natural de La Bañeza, de carácter disciplinado y trabajador, es digna de ejemplo, el mismo que han seguido sus hijas, quienes valoran el esfuerzo de su madre y agradecen todo lo que de ella han aprendido, y lo que todavía les sigue enseñando. Así sus hijos Ana, Aurora, Emilio, Carmen y Conchita, sus nietos Jorge, Javier, Enrique, Marta, Susana, Elías e Inés, y su biznieto Guzmán le recuerdan lo maravilloso de haber perseguido una vocación que nació en Villalpando, localidad en la que Concepción vivió de niña, y donde desde muy temprana edad se dejó conquistar por la magia de esta ciencia que lucha contra la enfermedad, pues debajo de su casa había una farmacia donde ella pasaba largas jornadas.
La historia de la Farmacia de Mata Espeso
En 1970 Concepción se hizo cargo de la actual Farmacia de Mata Espeso, aunque fue con 23 años cuando esta joven bañezana abrió su primera farmacia en León, en San Agustín, después de estudiar la carrera en Madrid.
Las paredes de esta céntrica farmacia custodian historia; ya el recibimiento de un mostrador del siglo XVII de madera de nogal español tallada con figuras alegóricas delata la presencia de piezas únicas.
La Farmacia de Mata Espeso, que anteriormente tuvo una localización cerca de la Plaza Mayor de la capital leonesa, fue la primera en tener un microscopio eléctrico, una autoclave eléctrica y una destiladora eléctrica también. Además, fue pionera en la realización de fórmulas magistrales, técnica que en la actualidad siguen desarrollando.
Otra de las curiosidades de este emblemático lugar, son una colección de los primeros medicamentos embotellados en el mundo, y otras dos de tarros de cerámica de la Escuela Francesa y de la Escuela Española de la Cartuja de Sevilla.
Hoy en día, la Farmacia de Mata Espeso es un núcleo de actividad continua, pero que conserva algunos detalles y la esencia de las mujeres de la familia: cercanía y profesionalidad.
